¿Sabías acaso lo mucho que has cambiado mi vida?
Desde que te tengo conmigo, tornaste mis días de encierro y desesperanzas por otros de alegrías y renovados afanes.
Tan dentro de mí estás, que llegas a tocar mi corazón inyectándome vida; haciéndome disfrutar nuevamente lo que ya consideraba perdido: de la naturaleza, del sexo, de sentirme intensamente vivo.
Estoy realmente agradecido, que será mi última voluntad cuando yo muera, que otro te disfrute plenamente así como lo hago ahora.
¿Que sería de mí sin ti, mi pequeño marcapasos?
Desde que te tengo conmigo, tornaste mis días de encierro y desesperanzas por otros de alegrías y renovados afanes.
Tan dentro de mí estás, que llegas a tocar mi corazón inyectándome vida; haciéndome disfrutar nuevamente lo que ya consideraba perdido: de la naturaleza, del sexo, de sentirme intensamente vivo.
Estoy realmente agradecido, que será mi última voluntad cuando yo muera, que otro te disfrute plenamente así como lo hago ahora.
¿Que sería de mí sin ti, mi pequeño marcapasos?
2 comentarios:
Doctor Pedraza: claro que se trata de un alma muy bondadosa.
Un saludo.
Empezo tan bien!, quien fuera un marcapasos, si provoca el escribir!.
Muy bueno
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