Oscar y Dany, 2016 Fotografía Oscar Mtz. Molina
Algún día del año dos mil uno estando con mi mujer
en la sala, llegaron hasta nosotros mis hijos, Oscar de diez y Daniela de ocho,
con unos pequeños pollos que les habíamos regalado como mascotas.
-¿podemos abrirlos para ver cómo son por dentro?
Preguntó mi hijo.
-No le tenemos miedo a la sangre. Agregó mi hija.
-No le tenemos miedo a la sangre. Agregó mi hija.
Y yo, en vez de sentir orgullo pensando en que,
había allí sendos embriones de médicos, sentí un escalofrío.
Ante mi negativa rotunda y absoluta, me dijo
entonces mi hija, mostrando su carita más dulce.
-¿podemos entonces meterlos al micro para ver cómo explotan?
-¿podemos entonces meterlos al micro para ver cómo explotan?
Este año cumplimos quince de acudir a terapias familiares y reconversión de
actitudes torcidas. Y solo por si acaso, sigo manteniendo la costumbre de
dormir habiendo echado doble llave al cerrojo de mí recamara.
© 2017 By Oscar Mtz. Molina