domingo, 19 de diciembre de 2010

Del Amor I: Incomprendido

El sol había cavado su tumba entre las montañas.
Se incorporó y, aún somnoliento, exclamó:
 —¡Maldición! Otra vez la noche y no supe del día, de sus horas, sus olores.
Llorando de rabia, salió a buscar al sol y succionó la roja y cálida sangre de su víctima.


2 comentarios:

Médicos mexicanos por la cultura y el arte dijo...

Doctor Pedraza, eso se llama ser un tipo osado.

Felicidades.

Alfonso Pedraza dijo...

Gracias Manuel, voy a segir subiendo minis de los inicios de la marina. Verás que muchas no son de mucha calidad pero me dara gusto verlas aca.