Aunque su madre le dijo que no, que Santa Claus no encontraría a su papá en “la bola”, él confiaba que aún en plena guerra de Revolución pudiera traerlo, así que rezó con todas sus fuerzas por ello.
El día de Navidad, junto al árbol, en una caja muy bonita y vestido con sus mejores galas, halló el cuerpo frío y rígido de su padre.
Imagen tomada de la red.
2 comentarios:
Aunque no sé lo que es la bola, el micro impacta. Del gremlin tenía que ser... Antinavidad en estado puro.
Hola, Elisa. "La bola" es sinónimo de la revolución mexicana.
Y sí, tenía que ser de gremlin.
Un abrazo.
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